Frases de amor

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Frases de amor
Quién definió el término locura probablemente alguna vez también estuvo enfermo de celos.
Si no has sentido el vértigo de los celos quizás no hayas estado enamorado.
No juegues a medir el amor de alguien por la capacidad de tener celos al verte con otra persona. Entre estirar la cuerda y romperla no hay mucho espacio.
Los celos son al amor lo que un gusano a la manzana. Avanzan poco a poco pero terminan destruyendo de manera letal.
Donde no hay celos no hay amor.
Los celos brotan ordinariamente en los hombres por falta de talento, y en las mujeres, por exceso de penetración.
Los celos, cuyo objeto parece no ser otro que la persona amada, demuestran mejor que todas las demás pasiones, que no amamos a nadie más que a nosotros mismos.
Si los celos son señales de amor, es como la calentura en el hombre enfermo, que el tenerla es señal de tener vida, pero vida enferma y mal dispuesta.
Es propia condición del celoso, parecerle magníficas y grandes las acciones de sus rivales.
Era una mujer tan fea que podía hacer que una mula se apartara de un cubo lleno de avena.
La mente de una mujer tiene las ideas más limpias que las de un hombre, y es así porque las cambia con más frecuencia.
Las mujeres deberían llevar unas etiquetas en la frente que dijeran: "Advertencia del Departamento de Sanidad del Gobierno: las mujeres pueden perjudicar gravemente sus cerebros, genitales, cuenta corriente, confianza, cuchillas de afeitar y la buena opinión entre sus amigos".
Cuando una mujer que está en compañía de dos hombres se dirige casi exclusivamente a uno de ellos, puede estar seguro de que está ocupada debajo de la mesa, presionando el pie del otro.
La zona más erógena de una mujer es su mente.
Cuando ya tenga un pie en la tumba diré toda la verdad sobre las mujeres. La diré, saltaré dentro de mi ataúd, cerraré la tapa y diré: " Ahora haced lo que queráis".
El único lugar que los hombres quieren que sea profundo en una mujer es su escote.
El cerebro no ha sido nunca un inconveniente para una chica si lo oculta debajo de una blusa transparente.
Correr detrás de las mujeres nunca le ha hecho daño a nadie. Lo que perjudica es alcanzarlas.
El truco más sensacional que se puede hacer con una mujer es librarse de ella mientras ella cree que se está librando de ti.
La vida entera de una mujer es la historia de sus afectos.
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