Frases de amor

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Frases de amor
Soy un icono con forma de corazón con ganas de colarse en tu smartphone.
Me gustas tanto que me comería a bocados todo tu cuerpo.
Asoma tu sonrisa por la ventana de mi alma y ¡zas! se evapora la tristeza de cualquier mañana.
Se desplaza el reloj en mi contra cada día, manecillas maléficas no ganaréis esta batalla, mi amor es fiero, loco, guerrero y eterno.
Devoro el tiempo con mis fauces de lobo estepario, engullo sin masticar los segundos que pasan cuando tu no estás.
Soy una súper heroína, etérea me desplazo levitando sobre eternidad de un amor que no sabe de tiempos.
Soy una fugitiva, me busca la autoridad del tiempo, ese comisario violento que quiere limitar nuestras existencias... conmigo lo lleva crudo pues soy implacable en mi huida.
Alargo mi mano a través del orificio del destino para llevar nuestro amor al espacio de lo eterno.
Un silencio seco y mudo quebró la luz de mi vida cuando tu te fuiste. Sola y desgarrada se quedó mi alma deambulando por la locura del amor eterno.
Ligero de equipaje partió mi último latido. En mi maleta de mano cupo tu amor comprimido para este viaje a la eternidad en vuelo low-cost.
Maldito sea lo eterno cuando se desvanece la realidad de que nuestro amor se quiebra con el paso del tiempo.
Mi velocidad cero se multiplica por tu tiempo para anular el espacio que nos separa y así poder amarte en un estado eterno relativo.
No hay camino trazado que separe mi alma de tu alma.
Convergen los raíles de este tren-pájaro que te lleva volando sobre los hierros de mi amor hacia lo más profundo de mi corazón.
Las distancias deberían estar prohibidas cuando dos corazones se aman.
Odio subir a este autobús de la tragedia que me conduce al infierno de tu ausencia.
Ver tu cara en la pantalla de mi pc me recuerda la maldita distancia que separa mi alma de tu alma.
No dejes que la distancia te ponga triste, no puede ganar esta batalla. Sé fuerte, sé libre y ama sin condición ni lejanía.
Saber que jamás te vas a fijar en mí me hace pensar en la maldad de lo imposible.
Me has dicho que lo nuestro es imposible y me he dado cuenta de que ya no te quiero. Eres demasiado terrenal.
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