Antes de que llegue la eternidad me gustaría confesarte que te mentí al decirte que te amaría hasta la muerte. Lo siento amor....pero te amaré eternamente.
Dos personas que envejecen juntas y continúan caminando de la mano mientras sienten sus corazones más unidos, no se quieren, sino que son el amor personificado.
Cuando no te tenía sólo deseaba que pasase rápido el tiempo para que empezases a quererme, y ahora que te tengo no consigo parar ese tiempo para recrearme en ti.
Quisiera poder decirte que te amaré para siempre, más allá de mi cuerpo y de las cosas. Pero no puedo mentirte. No tengo constancia de que exista la eternidad.