El amor eterno es ciego, pero necesita tu mirada, es descarado aunque requiera de tu paz, es frágil y sin embargo vive para siempre con tus serenas palabras.
No hay preguntas para los enamorados, tampoco dudas o desconfianza, porque el amor es pureza, es la transparencia de dos almas que se sienten una sola.
Tan solo por un beso tuyo, un sí de tus labios, rompería con el camino que he forjado para construir junto a ti el más bello de los puentes hacia el cielo.
Los senderos que abrimos a cada paso de nuestra relación han ido floreciendo y hoy quiero que te pares junto a mí y mires lo maravilloso que es continuar caminando a tu lado.
A veces ocurre que en un instante dos almas se entienden y se unen para siempre. Así que ofrécela siempre, aunque creas que no ocurrirá... Porque un día lo hará.