Cada día que pasa sin ti es un día de otoño: las hojas de todos los árboles que han crecido caen lentamente sobre el suelo dejando apenas el rastro de lo que un día estuvo tan vivo.
La tristeza la componen dos personas que no llegaron a encontrarse, dos almas solitarias que no encontraron a su amor verdadero, dos corazones vacíos porque el destino no les dejó unirse.
Antes de que anochezca es mejor que me vaya a casa y me encierre a solas, porque cuando cae la noche y se iluminan las estrellas, mis lágrimas por ti inundan el universo.
Quizás no tomé las decisiones acertadas. Quizás no supe expresar cuánto te amaba. Quizás el miedo a perderte se clavó en mis entrañas y me llevó finalmente a perder lo que más me importaba.
El amor es como un trayecto en tren, con sus estaciones y sus pasajeros. Sin embargo, la única certeza de ese viaje es que el conductor será el único que seguro llegará a la última parada.