Frases de amor
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Frases de amor
Creed en las personas que os rodean, porque están a vuestro alrededor por algo. Miradles y confiadles vuestras palabras, las que no os atrevéis a pronunciar, porque en ellos obtendréis la respuesta.
Aquellos amigos que ya no pueden estar aquí, esos que nos han dejado, también están a vuestro lado hoy, aún más cerca, aunque no los veáis.
Los buenos amigos están contigo y permanecerán a lo largo del tiempo, por mucho que pase o por otras circunstancias que puedan impedir que estéis más cerca.
Regala hoy la mejor versión de ti mismo y disfruta del momento. Y como la vida no es otra cosa más que amor, a alguien o a algo, ámales todo lo que puedas.
Tu amigo continuará estando a tu lado siempre, lo tienes aquí hoy, a tu vera para acompañarte.
Existe alguien que, con su inocencia, te regala lo mejor de su persona sin que se lo pidas, esa persona, es tu amiga.
Es posible que no hayamos mirado a nuestro lado, porque siempre está ahí esa persona que quiere quererte como tú lo desees, que te da todo lo que necesites y que te escucha y comprende cuando lo necesitas.
Enamorarse de tu mejor amigo tiene una gran ventaja: al menos ya le has visto la cara nada más levantarse.
La verdadera amistad palpita con muy pocas personas y contigo mi corazón se pone a ritmo de samba.
Junto a un buen amigo lo amargo de la vida es menos desagradable.
Un buen amigo es un superhéroe capaz de entenderte a miles de kilómetros de distancia.
Te miro a los ojos y sigo viendo en ti esa mirada amiga que me ha acompañado durante todo el viaje de mi vida.
Lo bueno de los verdaderos amigos es que su amistad es duradera, mientras otros van y vienen, ellos siempre se quedan para ayudarte a arreglar los desperfectos de tu vida.
Los amigos desafiamos al tiempo, somos capaces de tomar un café después de años sin vernos y creer que fue ayer nuestra última cita.
Un amigo es capaz de sortear los obstáculos del tiempo y la distancia para abrigar nuestro corazón cuando hace frío.
La vida nos ha separado pero en mi corazón hay un trozo dedicado al amor de un verdadero amigo.
Pongo mi confianza en ti puesto que mi amor no lo quieres. Pongo mi confianza en ti puesto que has decidido que nuestra gran complicidad no te mueve nada por dentro.
Al despedirme siempre te doy un beso en cada mejilla, pero si una noche pudiera darte un beso en mitad de la oscuridad te lo daría en esa boca que anhelo y entonces te darías cuenta de todo lo que callo en silencio.
No hay amigos que se impliquen tanto como tú y sin embargo con los que yo sienta que no es suficiente. No me sirve porque lo que deseo es que estés a mi lado y un buen día sientas lo mismo que yo y dejes de ser solo mi mejor amigo.
Las veces que en silencio veo como te besas con otra, un puñal se clava en mi pecho cual dardo certero en la diana, siento que no voy a poder continuar queriéndote en secreto pero no quiero perderte y al final siempre acabo prefiriendo tenerte aunque sea entre las sombras.
